En los últimos meses estamos asistiendo al anuncio de movilizaciones en el sector sanitario en todo el Estado, fundamentalmente del sector médico. El seguimiento y difusión mediática de estas reivindicaciones por mejores condiciones laborales individuales contrasta con el relativo silencio de las últimas dos décadas en contra de la privatización de los servicios sanitarios y sociales. Queremos reivindicar que ambas están unidas. Las condiciones actuales no serían posibles si la mayor parte de los trabajadores/as del Sistema Nacional de Salud no hubieran asistido impasibles al proceso de comercialización de este derecho, tanto en Madrid como a nivel nacional.
La privatización de los servicios sanitarios, específicamente en la Comunidad de Madrid, se inició hace 18 años con la descapitalización y cierre de centros públicos y su sustitución por centros privados, con el consiguiente trasvase de dinero de nuestros impuestos hacia todo tipo de empresas. Posteriormente, hemos asistido al deterioro de los centros sanitarios de gestión pública directa (tanto hospitales como centros de salud) para que sean incapaces de abordar la demanda de su zona geográfica. En el caso de atención primaria, esta degradación planificada se concreta en una priorización de lo asistencial (lo urgente) y lo administrativo (lo importante para la administración), abandonando la prevención y la actuación contra los “productores de enfermedad”. En cuanto a servicios hospitalarios y centrales, el crecimiento continuado de las listas de espera empujan a los ciudadanos hacia los seguros privados de salud y reforzando el ciclo privatizador.
Este proceso afecta a los profesionales sanitarios/as directamente en sus condiciones laborales, ya que deteriorarlas es un paso necesario en la privatización del Sistema Nacional de Salud. Con la esperanza de no verse afectados, la mayoría no han reaccionado hasta ahora a este proceso. Sin embargo, no son los únicos colaboradores necesarios. Por una parte, los sindicatos con representación en el sector se han mostrado indiferentes durante dos décadas al deterioro de lo que decían defender. Por otra parte, la izquierda institucional a nivel local y estatal han mantenido las condiciones necesarias para que se den estas privatizaciones.
Las soluciones para garantizar un sistema sanitario y de servicios sociales de calidad, democrático y que atienda en tiempos adecuados las necesidades de la población, mientras garantiza unas condiciones laborales dignas a sus trabajadores/as, no vendrán de los mismos que han sido partícipes de su destrucción. El incremento del gasto sanitario y las mejoras económicas para el sector médico, sin cambiar el resto del sistema, no supondrían más que un parche puntual para comprar el silencio de los profesionales sin abordar las causas del problema. Desde SOV CNT MADRID – SECCIÓN SANIDAD Y SERVICIOS SOCIALES reclamamos:
- Democratización de la gestión sanitaria, con participación directa de usuarios/as y trabajadores/as
- Derogación de las leyes que permiten privatizar el sistema (Ley 15/97, artículos 67 y 90 de la Ley General de Sanidad)
- Rescate de lo privatizado.
- Incremento de plantillas para dar toda la atención necesaria desde el sistema público, eliminando los conciertos.
- Creación de un sistema público de farmacia.
- Integración real de la asistencia a nuestros mayores de las residencias a través de la atención primaria.
Actuación sobre los determinantes de la morbi-mortalidad, lo que permitiría a medio plazo reducir el gasto sanitario.